El síndrome del “trabajador quemado” es un concepto que se atribuye a un estilo de vida radical en el que el rendimiento y el “no poder parar” acentúan un cansancio vital extremo y una brevísima atención a esa relación de fragilidad que establecemos con el mundo, con los otros y con nosotros mismos. Vinculado al distrés, la negatividad y la frustración, su acción descansa en la proyección de un individuo que se halla permanentemente cansado, expuesto a situaciones de irritabilidad y despersonalización. Ahora bien, a diferencia de este agotamiento crónico, el estrés no es necesariamente negativo, pues, manejado de forma efectiva puede ayudar a resolver situaciones complicadas, animar a la acción e incluso puede llegar a evitar problemas de salud.
En este curso aprenderemos a diferenciar el estrés del distrés, qué papel juegan en nuestras emociones, cómo identificarlos en nuestro día a día y qué consecuencias tienen en nuestro bienestar.
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Objetivo general:
Proporcionar una comprensión integral del estrés/distrés y cómo utilizar el estrés de manera positiva para mejorar el rendimiento laboral, la gestión de las emociones y la calidad de vida.
¿A quién está dirigido este curso?
Estas sesiones de aprendizaje y relajación están dirigidas al público en general, trabajadores, personal directivo, estudiantes, padres de familia… y cualquier persona que tenga dificultad para fijar la atención y controlar los estados de hiperactividad negativa.